1. El primer descapotable retráctil lleva la firma Peugeot. En el Salón de París de 1934, Peugeot presentaba la tecnología Eclipse. Sobre la base de un Peugeot 401, la marca introducía una tecnología que permitía retraer el techo de forma eléctrica. Después llegaría a otros modelos como el Peugeot 601 o el 402. Décadas después, modelos actuales como el 207 CC y el 308 CC adaptan este sistema.
2. ¿Por qué un león? El logo del león apoyado sobre sus patas traseras viene de lo que representa este animal y las características de las sierras que fabricaba Peugeot: eran resistentes como sus dientes, flexibles como su espinazo y rápidas en el corte como la agilidad de este felino. El 20 de noviembre de 1858 Émile Peugeot (padre de Armand Peugeot y fundador de la marca tal y como la conocemos hoy en día) registró en el Conservatorio Imperial de Artes y Oficios la ya famosa imagen.
3. ¿Por qué los modelos Peugeot se llaman como se llaman? La denominación de tres cifras, con sus variantes, es un rasgo característico de marca. En 1929 se lanzaba el Peugeot 201, que se bautizó con ese nombre al tratarse del proyecto 201 de la oficina de estudios. Desde entonces se mantiene esta tradición: la primera cifra identifica a la familia del vehículo y su tamaño (segmento). La tercera cifra indica la generación y, actualmente, se limita a un 8 para la mayoría de modelos o un 1 para la oferta dirigida a mercados objeto de conquista. Y el 0 del medio, invariable, es el eslabón que une el segmento con la generación y sólo cambia en caso de siluetas complementarias, como los cross-over, que pasan a tener un doble 0. Como toda buena regla, existe una excepción: modelos especiales como el Peugeot RCZ recurren a letras. Las versiones deportivas recurren al apelativo ‘R’ o ‘GTi’ para indicarlo (por ejemplo: RCZ R y 208 GTi). Y conceptos como los coupe-cabriolet o familiares están indicados mediante las siglas CC o SW respectivamente.
4. Peugeot inventó el concepto de patrocinio deportivo. Mucho antes de que marcas de calzado se hiciesen célebres uniendo su nombre a las grandes estrellas del deporte (Jordan-Nike), Peugeot creó este concepto. En 1928, la familia Peugeot fundaba el Football Club Sochaux, el primer club de empresa, generando lo que sería el primer patrocinio deportivo. Este club se fusionaría en 1930 con el equipo de la ciudad vecina, el AS Montbéliard y se cambia el nombre por el actual, quedando como “Football Club Sochaux-Montbéliard”. Actualmente juega en la segunda división francesa.
5. El primer vehículo eléctrico de Peugeot data de 1941. En ese año y debido al racionamiento del combustible que experimentaba Francia con motivo de la Segunda Guerra Mundial, Peugeot saca el Peugeot VLV, cuyas siglas hacen referencia a “Vehículo Ligero Urbano”. Funcionaba con cuatro baterías de 12V conectadas en serie, contaba con una autonomía de 80 km y alcanzaba los 30 km/h. De este VLV se produjeron 377 unidades y, aunque no fue un éxito comercial, se adelantó varías décadas a la historia del automóvil.
6. Peugeot es la única marca que cuenta con oferta de movilidad total. Peugeot es la única marca con producto en el mundo de las dos, las tres y las cuatro ruedas. En el de las dos ruedas, con su oferta de bicicletas y de scooters; en el de las tres, con su Peugeot Metrópolis y en de las cuatro con toda una cartera de turismos y vehículos comerciales.
7. Peugeot ha llegado a fabricar hasta un piano. Y mucho más. Peugeot Design Lab es el estudio de diseño de la marca dirigido a clientes externos. Fruto de su experiencia como constructor de automóviles y fabricante industrial diseña productos, servicios y experiencias en sectores de actividad de lo más diversos. Algunos de sus trabajos más mediáticos han sido, por ejemplo, el piano creado junto a Pleyel. Además, también han firmado creaciones como un sofá compuesto de carbono y piedra volcánica de Volvic: el sofá Onyx.
8. Peugeot ganó la primera carrera de la historia. La marca francesa ganó la carrera París-Ruán, considerada como la primera carrera de la historia, con un Peugeot Phaeton. Disputada en Francia del 19 al 22 de julio de 1894, se trataba de un concurso de “coches sin caballos”. El evento es organizado por Pierre Giffard, periodista de «Le Petit Journal«, un periódico parisino editado de 1863 a 1944. Se registraron 102 inscripciones pero solamente 21 competidores participaros en la prueba final, de París a Ruán (126 km). El concurso recompensa a los vehículos inscritos según tres criterios: seguridad, fácil de usar y relativamente barato. El primer premio de 5000 francos es compartido entre Panhard & Levassor y Peugeot.